31 de mayo de 2019.
En el día de ayer, el MIDES dio a conocer los datos de personas en situación de calle y entendemos oportuno hacer algunas reflexiones.
En primer lugar vaya nuestro reconocimiento hacia una tarea que entendíamos necesaria, llevada a cabo con la participación de agencias internacionales, y que debe servir como punto de partida, para conocer en profundidad un fenómeno social que nos golpea día a día.
En segundo lugar, la constatación de que algo que veníamos denunciando en conjunto con otros actores políticos, como el propio ex intendente Martínez, no respondía a un interés político -electoral, sino a una verdadera preocupación social del fenómeno.
Yendo a las explicaciones que se dieron en la presentación del informe, se destacó que esto se enmarca dentro de un fenómeno a nivel mundial, con lo cual se le ubica busca dentro de esa tendencia.
Similares argumentos se utilizan en materia de seguridad a la hora de explicar el aumento del delito. No negamos que esto sea parcialmente cierto, aunque las causas son bastante distintas a las que podemos apreciar en Europa o en otra latitudes. En todo caso, tenemos la convicción que este informe, aunque un tanto tardío, debe oficiar como punto de partida de otros que le seguirán.
Leyéndolo, los motivos que las personas declararon para ingresar a situación de calle se agrupan en dos grandes categorías: a) problemas de convivencia (mas de más del 50%) b) consumo de sustancias ( 30% ), y nos dice poco hacia adentro de las mismas. Seguramente eso se deba a que el trabajo de campo se realizó durante una sola jornada nocturna, lo que nos indica que debemos continuar profundizando en esta situación.
Un trabajo de investigación más extenso en el tiempo, nos permitiría contar con un universo de casos mayor. De esta forma, siguiendo el argumento esgrimido de que en los últimos diez años pasaron más de 20.000 personas por situación de calle, de haber llevado adelante un relevamiento en los últimos cinco años, hubiéramos podido agregar más motivaciones que llevaron a entrar y salir de la situación de calle.
Desde el punto de vista estrictamente político, siempre se dijo que nuestras denuncias eran una exageración de la realidad o que estábamos haciendo política electoral.
Sin embargo, ahora el año electoral es tomado como un elemento a favor por la señora ministra, que destaca la honestidad de la cartera en dar a conocer estos datos, “sabiendo que serán utilizados por la campaña electoral”, picardía que politiza el tema y lo pone a cubierto de las críticas que vendrán.
Pero si de picardías políticas se trata, quizás nosotros podríamos concluir que el MIDES decide hacer este estudio por lo problemas que se le estaban generando con los precandidatos del FA en su discurso de campaña y con el ministerio del interior que se ha mostrado crítico y contradictorio en cuanto al número de personas en situación de calle.
No obstante, coincidimos con el MIDES que la solución no será mágica ni de shock, pero al mismo tiempo debemos de reconocer que lo hecho hasta ahora no ha dado los resultados esperados.
Por lo tanto, entendemos que en el largo plazo deberemos profundizar en las causalidades que llevan a las personas a pasar a situación de calle, para atacarlas en su origen de forma más eficiente.
Esto solo será posible a través de un relevamiento periódico, que nos proporcione mayor cantidad de información y de mejor calidad, para utilizarla en el diseño de las políticas tendientes a solucionar esta problemática.
Mientras tanto, en el corto plazo deberemos rever la situación de los refugios, la disponibilidad de alojamientos, la calidad de su convivencia (que es una de las causas que se aducen para no concurrir), y la política de ingreso y egreso de los mismos.
Si hablamos de tendencia mundial, salvando las diferencias, también se puede consultar la experiencia de países europeos que han debido albergar a decenas de miles ante la crisis migratoria en los últimos años. Quizás puedan tomarse ideas que se adapten a nuestra necesidad.
Lo que parece claro, es que lo ensayado hasta ahora no ha dado los resultados esperados. Por lo tanto, no introducir cambios o seguir comentando el diagnóstico, no ayudará la situación de las personas en situación de calle, particularmente ante las condiciones del clima que empeorarán en las próximas semanas.
Gloria Rodríguez Santo
Representante Nacional