Un día como hoy, pero hace 100 años, llegaba a este mundo un hombre que se convertiría en uno de los mayores representantes de la paz, la libertad, la igualdad y la democracia. Padeció el dolor de la discriminación, la intolerancia y la injusticia, pero en lugar de llenarse de odio, tuvo la grandeza y la fortaleza para elegir caminos de tolerancia, igualdad y reconciliación. Aunque con su humildad nunca lo pretendió, no sólo se convirtió en un héroe sino en eso que él veía tan imposible que es ser una leyenda. Su legado trasciende y trascenderá toda época y lugar y así como el sufrimiento no logró nunca apagar esa sonrisa eterna que lo caracterizaba, tampoco lo logrará la muerte…
Hoy a 100 años de su nacimiento, por siempre presente y más vigente que nunca nuestro querido ejemplo de líder y ser humano, Nelson Mandela.